Las hormonas de crecimiento (GH, por sus siglas en inglés) son hormonas que estimulan el crecimiento y la reproducción celular. Sus efectos anabólicos (de construcción muscular) se buscan comúnmente para aumentar la masa muscular o la estatura. Originalmente, la GH se utilizaba para fomentar el crecimiento en el ganado y para tratar enfermedades como la distrofia muscular, la osteoporosis o la esclerosis múltiple.
Muchos atletas jóvenes, por desconocimiento de los efectos secundarios y por impaciencia con el progreso natural, recurren a las hormonas de crecimiento. Sin embargo, su abuso puede provocar problemas de salud graves (ver efectos secundarios a continuación).
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¡No consumas esteroides ni hormonas de crecimiento con fines recreativos! Son una pérdida de tiempo, dinero y, potencialmente, de vida.
Muchos traficantes mezclan hormonas de crecimiento con drogas adictivas para que los consumidores se vuelvan dependientes de sus pastillas e inyecciones. Muchos atletas ni siquiera saben que están consumiendo heroína junto con hormonas de crecimiento.
Para un artículo más detallado sobre las hormonas de crecimiento, consulta Wikipedia.
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